Nueva legislación exige documentación para votar en los EEUU
[Sun Apr 13 12:50:59 CDT 2025]

Hace unos días me encontré en la web de Associated Press con la noticia de que la Cámara de Representantes de los EEUU había aprobado una propuesta detallando los documentos que podrán usarse para votar en las elecciones estadounidenses. Que quede bien claro: la propuesta todavía debe discutirs en el Senado y no se ha convertido en ley. Muchas cosas pueden cambiar de aquí a entonces, suponiendo que llegue a aprobarse algo al final. De todos modos, desde que llegué al país siempre me pareció un sinsentido que no tuviesen un documento nacional de identidad, lo cual les conduce continuamente a callejones sin salida que muestran bien a las claras lo irracional del sistema en su conjunto. El caso es que, se mire como se mire, a muchos estaounidenses (los más patriotas, qiuzá) les encanta asumir que su país está siempre décadas por delante del resto del mundo. Pero la realidad es que en este y otros asuntos les he visto quedarse más y más atrasados durante las décadas que he vivido aquí. Para muestra un botón. Para empezar, no existe realmente un censo electoral completo realizado por el Estado. Los ciudadanos que deseen votar han de registrarse. Ya de entrada, eso elimina un buen número de votantes potenciales. Pero es que, por si eso fuera poco, la propuesta aprobada por la Cámara de Representantes detalla la siguiente lista de documentos que pueden usarse para probar la identidad:

  • A REAL ID-compliant driver’s license that “indicates the applicant is a citizen.”
  • A valid U.S. passport.
  • A military ID card with a military record of service that lists the applicant’s birthplace as in the U.S.
  • A valid government-issued photo ID that shows the applicant’s birthplace was in the U.S.
  • A valid government-issued photo ID presented with a document such as a certified birth certificate that shows the birthplace was in the U.S.

Para quienes no están familiarizados con la vida cotidiana de los EEUU habría que puntualizar, en primer lugar, que la amplia mayoría de estadounidenses no tienen pasaporte. Pero es que, además, el documento sale bien caro para quienes lo necesitan. Por supuesto, no todo el mundo ha estado en el ejército o tiene un carnet de conducir. Pero, por si todo esto fuera poco, obsérvese que los últimos dos documentos incluyen como condición que quien hace la petición haya nacido en los EEUU. Sin embargo, no es necesario haber nacido en los EEUU para ser ciudadano estadounidense. En fin, que aunque el deseo de obligar a los votantes a probar su identidad en el momento de depositar su voto en la urna me parece lógico y normal, la irracionalidad del sistema en su conjunto convierte todo esto en un auténtico galimatías cuyo efecto final, en realidad, es que un buen número de ciudadanos ni siquiera se molesten en votar. Hay quien piensa que esa es, precisamente, la intención real de los representantes republicanos que han aprobado la propuesta. Pero, de una u otra forma, se mire como se mire, en mi opinión el problema de fondo es que el sistema en su conjunto no es sino un parcheado improvisado que malamente funciona. Y, sin embargo, nadie parece tener la voluntad de meterle mano y reformarlo en profundidad. Por desgracia, lo mismo se aplica a otros muchos aspectos de la vida política estadounidense. {enlace a esta entrada}

Lo saludable es evitar las grandes cenas
[Sun Apr 13 12:43:35 CDT 2025]

El New York Times ha publicado un artículo titulado Should Dinner Be the Smallest Meal of the Day? que me parece bien interesante porque viene a confirmar, una vez más, que la dieta mediterránea tradicional (que no la moderna, que cada vez se le parece menos) es una de las más saludables.

For decades, nutrition researchers have focused on what — not when — people eat, so we don’t have many large or long-term studies on the influence of meal timing on health, said Nour Makarem, an assistant professor of epidemiology at the Columbia University Mailman School of Public Health.

But, she said, the studies that do exist show some consistent links. People who consume a greater percentage of calories in the evening tend to be at higher risk for obesity, Type 2 diabetes, high blood pressure and higher levels of inflammation.

Your body’s internal clock, which regulates how your cells function, may be at least partly to blame, said Frank A.J.L. Scheer, the director of the medical chronobiology program at Brigham and Women’s Hospital in Boston.

(...)

If your blood sugar is frequently elevated from large evening meals, Dr. Garaulet said, your risk of developing high blood pressure, chronic inflammation, obesity and Type 2 diabetes may rise.

Research also suggests that consuming large meals at night can increase the activity of certain metabolic pathways that lead to fat storage while you’re sleeping, Dr. Scheer said.

La recomendación de los expertos no es tanto que la cena sea la comida más ligera del día como que, cuando menos, no sea la más grande, algo que sucede cotidianamente en la sociedad estadounidense. {enlace a esta entrada}