Aunque Marx nunca
hiciera explícita una teoría sobre el imperialismo, sí que escribió acerca
del colonialismo en
la que es considerada su obra cumbre, El Capital. Asimismo, también dejó escritos
algunos análisis de los efectos del colonialismo en Irlanda y la
India que, hasta cierto punto, pueden considerarse como inspiradores de las
teorías que posteriormente diera a luz Lenin.
The need of a constantly expanding market for its products chases the
bourgeoisie over the whole surface of the globe. It must nestle everywhere,
settle everywhere, establish connexions everywhere.
The bourgeoisie has through its exploitation of the world market given a
cosmopolitan character to production and consumption in every country. To
the great chagrin of Reactionists, it has drawn from under the feet of
industry the national ground on which it stood. All old-established
national industries have been destroyed or are daily being destroyed.
They are dislodged by new industries, whose introduction becomes a life
and death question for all civilized nations, by industries that no longer
work up indingenous raw material, but raw material drawn from the
remotest zones; industries whose products are consumed, not only at home,
but in every quarter of the globe. In place of the old wants, satisfied
by the productions of the country, we find new wants, requiring for their
satisfaction the products of distant lands and climes. In place of the
old local and national seclusion and self-sufficiency, we have intercourse
in every direction, universal inter-dependence of nations. And as in
material, so also in intellectual production. The intellectual creations
of individual nations become common property. National one-sidedness and
narrow-mindedness become more and more impossible, and from the numerous
national and local literatures, there arises a world literature.
(Karl Mark y Friedrich Engels: The Communist Manifesto. Penguin
Books, Nueva York (USA), 1985, pp. 83-84)
Imperialism is a policy of extending control or authority over foreign
entities as a means of acquisition and/or maintenance of empires, either
through direct territorial conquest or through indirect methods of exerting
control on the politics and/or economy of other countries. The term is
often used to describe the policy of a country in maintaining colonies and
dominance over distant lands, regardless of whether the country calls itself
an empire.
(Wikipedia: Imperialism)
Tres hilos conductores relacionan a los Estados Unidos globales de la era de
la Guerra Fría con el intento de afirmar su supremacía mundial
a partir del año 2001. El primero es su posición de
dominación internacional, fuera de la esfera de influencia de los
regímenes comunistas durante la Guerra Fría, y en el plano
global desde la desintegración de la URSS. Esa hegemonía
ya no se basa en la magnitud de la economía estadounidense. Si bien
esta es importante, declinó a partir de 1945, y esa relativa
declinación continúa. Ya no es el gigante de la producción
global. El centro del mundo industrializado se desplaza con rapidez hacia la
mitad oriental de Asia. A diferencia de los países imperialistas
anteriores, y de la mayor parte de los demás países industriales
desarrollados, los Estados Unidos dejaron de ser un exportador neto de
capital y de serl el principal actor del juego internacional de compra e
instalación de empresas en otros países, y la fuerza financiera
del Estado reside en la persistente disposición de otros, sobre todo
de los asiáticos, a mantener un déficit fiscal que de lo
contrario sería intolerable.
El segundo hilo conductor es el peculiar estilo del imperio estadounidense,
que siempre prefirió los estados satélite o los protectorados
a las colonias formales. El expansionismo implícito en el nombre
elegido para las trece colonias independientes de la costa este del
Atlántico (Estados Unidos de América) era continental, no
colonial. El expansionismo posterior del "destino manifiesto" fue tanto
hemisférico como orientado al este de Asia, y tuvo como modelo la
supremacía marítima y el comercio global del imperio
británico. Hasta podría decirse que, en su afirmación de
una completa supremacía estadounidense sobre el hemisferio occidental,
era demasiado ambicioso como para verse limitado a la administración
colonial de sus partes.
Así, el imperio estadounidense consistió en estados
técnicamente independientes que obedecían a Washington, pero,
dada su independencia, eso exigía una constante disposición a
ejercer presión sobre los gobiernos, lo que comprendía presiones
de "cambio de régimen" y, donde era posible (tal como en las
minirrepúblicas de la región del Caribe), periódicas
intervenciones armadas estadounidenses.
El tercer hilo conductor relaciona a los neoconservadores de George Bush con
la certeza de los colonos puritanos de ser un instrumento de Dios en la tierra
y con la Revolución Americana que, como todas las grandes revoluciones,
desarrolló convicciones misioneras mundiales sólo limitadas por
el deseo de proteger a la nueva sociedad de libertad universal de la
corrupción del Viejo Mundo. La forma más eficaz de resolver
el conflicto entre aislacionismo y globalismo fue algo que se explotó
de manera sistemática en el siglo XX y que Washington sigue utilizando
en el siglo XXI. Suponía descubrir un enemigo externo que
representara una amenaza inmediata y mortal para el estilo de vida
estadounidense y la vida de sus ciudadanos. El fin de la URSS
eliminó al candidato más obvio, pero para principios de los
años 90 ya se había detectado otro en el "choque" entre
Occidente y otras culturas renuentes a aceptarlo, sobre todo el Islam. De
ahí que los dominadores mundiales de Washington de inmediato
reconocieran y explotaran las enormes posibilidades políticas de los
atentados de Al-Qaeda del 11 de setiembre.
(Eric Hobsbawn: Crisis y ocaso del imperio, traducción de Joaquín
Ibarburu para Clarín republicada en Kaos en la red,
publicada originalmente en The Guardian)
El Presidente de Alemania, Hortt Köhler, dimite tras sus polémicas declaraciones en las que habló
de las razones económicas y comerciales tras la presencia de tropas
alemanas en Afganistán. ¿Uno de esos extraños casos
de ingenua sinceridad?
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